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Disidencias de las FARC presionan a campesinos para expulsar al Ejército en Huila

La disidencia ‘Hernando González Acosta’ de las FARC estaría amenazando a unos 150 campesinos de ocho veredas en La Plata, Huila, para forzar la salida de 32 militares que realizan operativos en la zona. El coronel Henry Herrera, comandante de la Novena Brigada del Ejército, denunció la presión ilegal y advirtió sobre el riesgo para la población civil y la soberanía estatal.

Zonas afectadas

📍 Veredas bajo presión:

  • La Esperanza

  • Villa Mercedes

  • San Miguel

  • La Aurora

  • Esmeralda

  • El Triunfo

  • San Vicente

  • San José de las Juntas

Antecedentes violentos

  • Atentado reciente: Esta misma disidencia ejecutó un ataque con motocicleta bomba el 17 de abril, dejando 2 muertos y más de 30 heridos en La Plata.

  • Aumento de amenazas: La Gobernación del Huila alertó sobre posibles nuevos ataques y pidió a la ciudadanía reportar información clave para prevenir más violencia.

Respuesta institucional

✔ Ejército:

  • Reafirmó que no retirará las tropas, pues cumplen labores constitucionales de seguridad.

  • Solicitó intervención de DD.HH. y el Gobierno Nacional para proteger a los campesinos coaccionados.

✔ Gobernación del Huila:

  • Activó alerta temprana por posibles nuevos ataques terroristas.

  • Reforzó esquemas de seguridad en zonas rurales.

Preocupación humanitaria

⚠ Riesgos para los campesinos:

  • Presión para colaborar con grupos ilegales.

  • Posibles represalias si no obedecen las órdenes de las disidencias.

  • Desplazamiento forzado si la tensión aumenta.

Llamado a la acción:
El coronel Herrera instó a la población a no dejarse intimidar y a denunciar cualquier amenaza a las líneas de emergencia. Mientras, organizaciones sociales exigen protección para los líderes comunitarios y una respuesta contundente del Estado.

Contexto del conflicto

Esta disidencia opera principalmente en Huila y Caquetá, dedicándose al narcotráfico, extorsión y minería ilegal. Su modus operandi incluye:

  • Ataques con explosivos contra la Fuerza Pública.

  • Control social mediante amenazas a la población civil.

  • Presión para expulsar a militares y consolidar corredores del crimen.

¿Qué sigue?

  • El Ejército mantendrá presencia en la zona, pero podría reforzar operativos.

  • La Fiscalía investiga vínculos entre las disidencias y redes de narcotráfico.

  • La comunidad teme un recrudecimiento de la violencia si no hay una intervención firme.